«El éxito de El Hormiguero radica en que tanto los invitados como los telespectadores consiguen desconectar del día a día durante esos tres cuartos de hora.»
Jorge Marrón Martín. Nacido en Talavera de la Reina, Toledo, en 1980. Guionista, colaborador en El Hormiguero y en el programa radiofónico «Yu». También es integrante del grupo musical El hombre linterna, creador de la empresa de espectáculos «Tres calaveras huecas» y del programa «Peliculeros», en Paramount Channel. Inquieto por naturaleza y curioso por vocación.
-Hola Marrón. Comenzando por el principio, cuéntanos… ¿Qué querías ser de mayor cuando eras pequeño?
Pues siempre quise ser algo relacionado con el arte: dibujante, actor, estrella del rock… pero nunca me lo imaginaba siendo mayor, me veía a mí mismo haciendo esas cosas con el formato corporal de aquel entonces: pequeñito y con gafotas.
-¿Cómo y cuándo comenzaste a dar tus primeros pinitos en el mundo artístico?
En las obras de teatro que hacíamos en mi colegio. Grandes producciones como “El calderero” de gran éxito de público y crítica… aunque en realidad el público y la crítica eran los mismos: los padres. Así que tampoco es que tuviera mucho mérito.
-¿Cómo llegaste en 2006 al programa radiofónico de Pablo Motos?
A los pocos meses de que empezara “No Somos Nadie” quedó vacante un puesto de guionista. Pablo le preguntó a Juan y Damián (que ya eran amigos míos) si conocían a alguien que fuera igual de “tontorrón” que ellos. Le dijeron que sí, hice una prueba de guión que a Pablo le gustó, quedamos para comer y conocernos y ahí me contrató.
-Tras el éxito del programa, este se llevó a televisión. ¿Qué significó ese cambio en tu vida?
Pues imagínate, algo importantísimo. Éramos gente de radio, acostumbrados al ritmo y forma de trabajo de la radio que de repente se ponían frente a las cámaras para intentar trasladar el mismo espíritu de “No somos Nadie” a un formato visual… de primeras el vértigo era enorme, pero con mucho trabajo y apoyo entre nosotros lo conseguimos.
-¿Qué es lo más divertido de trabajar en El Hormiguero? ¿Y lo más duro?
La gran variedad de experiencias que tenemos en el programa y poder vivirlas junto a tus amigos, eso no tiene precio. Lo más duro es que de Lunes a Jueves no tenemos vida social, nos pasamos todo el día allí (porque a parte de colaboradores también somos guionistas), pero con el buen ambiente que tenemos con nuestros compañeros lo duro es mucho menos duro.
-El Hormiguero recibió en 2008 un premio Ondas al mejor programa de entretenimiento. ¿Por qué crees que se ha convertido en un éxito rotundo que bate audiencia a diario?
Yo creo que el éxito del programa radica en que tanto los invitados como los telespectadores consiguen desconectar del día a día durante esos tres cuartos de hora, y además conseguimos contagiarles el buen rollo que hay entre nosotros y el cariño con el que hacemos el programa.
-¿Compaginas tu paso por El Hormiguero con otros proyectos?
Sí. Juanito, Damián y yo tenemos una empresa juntos, “Tres Calaveras Huecas”, con la que hacemos guiones y espectáculos de monólogos, y también intentamos servir de plataforma para nuevos cómicos… es un poco devolver el mismo favor que nos hizo Pablo a nosotros con las nuevas generaciones, ya que hay gente con muchísimo talento. Además tenemos el programa “Peliculeros” en Paramount Channel con el que estamos encantados, y colaboramos con el programa de radio “Yu” una vez a la semana… vamos, que sólo nos falta aparcar coches en la puerta de Pachá por las noches.
-¿Qué es lo que más te ha costado conseguir hasta el momento?
Aprender el oficio de guionista con lo que ello conlleva, venciendo inseguridades y también controlando el ego (gran enemigo del ser humano) y es que como dice mi gran amigo Juan Herrera “un guionista es una rata con un folio”, y aunque suene raro es muy acertado.
-¿Y lo que más feliz te ha hecho?
Comprobar el cariño que nos tiene la gente y que tu trabajo sea valorado, tanto en nuestro país como fuera.
-¿Hay algo, a estas alturas, que aún te quede por hacer? ¿Algún sueño inconfesable?
Por supuesto, me quedan muchos sueños por cumplir todavía, por ejemplo escribir una serie o película de dibujos animados sería un sueño hecho realidad.